Álvaro Riva Rey*
09/09/2015 - El edil Sr. Ramón Acosta (“señor edil”
quiere decir otra cosa) ha retomado el tema del centro MEC de Florida y ha dicho
que “sucuchamos” el de Florida, es decir, que lo condenamos a un rincón
estrecho.
No sabe Acosta, porque no se molesta en
averiguarlo, que Centros MEC hace mucho que ha dejado de invertir en Florida,
que ya no puede o no asume las responsabilidades del contrato y que los
contribuyentes de Florida aportan -con infraestructura y personal- para un programa
que, al menos en Florida, tiende a cero.
CERO
A LA IZQUIERDA
La propia página web de Centros MEC informa
(cuando no desinforma, porque en algunos rubros hace diez años que no se
actualiza) que en 2010 apoyaron seis fiestas tradicionales, en 2011 siete, en el
12 cinco, en el 13 una y que de ahí en adelante se acabó la información.
A ese cero enorme se agregaron luego otros,
al punto que se cerró el de Fray Marcos, el de Sarandí Grande abre dos horas a
la semana y el de Cardal canceló el taller literario, que recibió el
lanzamiento y hoy funciona afuera.
Todos esos ceros, curiosamente, crecieron a
medida que avanzó la administración Enciso, ceros a la izquierda que -supongo-
el edil Sr. Acosta celebrará y se regodeará en su intimidad progresista.
CRECE
DESDE EL PIÉ
Cuando resolvimos recuperar la biblioteca
que era un penoso abandono que nunca conmovió a Acosta nos propusimos, además,
recuperar los espacios de la biblioteca.
Sorprendió entonces su colega edila Sra.
Amanda Della Ventura, que pidió un informe para saber si la Sala Héctor René
Rubio (que había sido un mugroso maloliente depósito del Centro MEC) volvería a
ser sala de lectura y jamás se le ocurrió preguntar qué pasaría con la sala que
el Frente Amplio había cerrado para transformar en Centro MEC.
Hoy estamos aquí: tenemos una biblioteca
renovada (¡compramos libros Acosta!), con una sala Héctor René a nuevo, hemos
recuperado el espacio que tenía el Centro MEC como sala de lectura (para
tranquilidad de Amanda) y hemos creado un Espacio de Inclusión Digital.
NO
SE DETIENE, NO PARA
Cada cosa en su lugar. Una biblioteca que
crece -la semana pasada recibió a un especialista para el financiamiento de
programas de una fundación internacional-, un espacio de inclusión digital que
es un polo de atracción y que ofrece los cursos que el Centro MEC no ofrece y
un Centro MEC estrecho en un sucucho, es decir, un rincón a su medida.
Debería saber el edil Sr. Acosta que en
estos momentos la intendencia de Florida, a través del Departamento de Cultura,
del EID de la biblioteca, se ha comprometido con el Programa Ibirapitá para la
capacitación de pasivos que recibirán las laptops donadas por el gobierno.
VAMOS
BIEN
Cuando asumió la administración Enciso en
2010 el intendente suscribió automáticamente el convenio con Centros MEC, el
mismo que acaba de caducar en mayo de 2015.
Centros MEC no ha promovido otro convenio,
asunto que posiblemente quede para luego del presupuesto nacional.
Sería bueno saber qué planea invertir en
Florida Centros MEC para saber si firmaremos o no un nuevo convenio. Porque de
ello depende lo que Florida aporte o disponga.
Sería bueno, también, que el edil Sr.
Acosta hiciera un planteo al respecto, o diera una mano, que pidiera por
Florida, por los Centros MEC que tanto le quitan el sueño y por la cultura que
lo desvela.
No pretenderá que Florida se haga carga de
sostener una estructura de cáscaras vacías, ¿o sí?
*Periodista,
director de Cultura.